¿Cenar fruta o un yogur es suficiente?
A veces identificamos una cena ligera con tomar solo una fruta o un yogur. Si añadimos algunos nutrientes más conseguiremos que nuestra última comida del día sea más equilibrada y nos ayude a descansar mejor.
Muchas veces oímos a alguien decir o tendemos a afirmar nosotros mismos: “hoy no ceno” si hemos comido mucho. O también: “esta semana sólo cenaré un yogur” para perder peso. Incluso hay quien opta por elegir sólo fruta para eliminar excesos, peso o simplemente como un camino para mejorar nuestra salud.
Sin embargo, esta práctica puede no ser todo lo saludable que creemos. El refranero asevera que Hay que desayunar como un rey, comer como un príncipe y cenar como un mendigo. ¿Tiene razón la cultura popular? ¿Es mejor cenar ligero o casi nada? Dos expertas consultadas por CuídatePlus nos explican en qué debe consistir una cena equilibrada.
Sobre esta afirmación popular, Carmen Aragón, del grupo de Nutrición de la SEEN, explica a CuídatePlus que “probablemente se refiere a los efectos sobre el descanso nocturno que produce una cena copiosa. El más conocido es el malestar producido por el reflujo gastroesofágico”, que provoca que los ácidos del estómago lleguen al esófago. De hecho, la evidencia científica muestra que consumir más calorías y, por tanto, más energía, durante el día hace que el descanso nocturno sea peor y se requieran siestas diurnas, comenta Aragón.
De esta forma, una cena ligera es una herramienta estupenda para facilitar el sueño, según añade Alba Santaliestra, secretaria Consejo General de Colegios Oficiales de Dietistas-Nutricionistas. “No obstante, tampoco debe ser muy escasa porque podría producirse el efecto adverso, es decir, que se produjera una sensación de hambre. Así que debe ser ligera, pero suficiente”.
Ingredientes para una cena ligera pero adecuada
Tanto Aragón como Santaliestra, apuntan a que una cena equilibrada, si seguimos las recomendaciones dietéticas que apunta el método del plato, también conocido como Plato de Harvard o Plato de Alimentación Saludable, debería dividir el plato en:
- La mitad del plato debería contener alimentos de origen vegetal, es decir, verduras.
- Un cuarto del plato se reserva a los alimentos proteicos, como la carne, el pescado, los huevos, las legumbres, etc.
- El cuarto restante ha de estar formado por hidratos de carbono, como las patatas, la pasta, el pan y el arroz. Eso sí, estos últimos conviene elegirlos en su versión integral.